El capitalismo ha formulado su tipo ideal con la figura del hombre unidimensional. Conocemos su retrato: iletrado, inculto, codicioso, limitado, sometido a lo que manda la tribu, arrogante, seguro de sí mismo, dócil. Débil con los fuertes, fuerte con los débiles, simple, previsible, fanático de los deportes y los estadios, devoto del dinero y partidario de lo irracional, profeta especializado en banalidades, en ideas pequeñas, tonto, necio, narcisista, egocéntrico, gregario, consumista, consumidor de las mitologías del momento, amoral, sin memoria, racista, cínico, sexista, misógino, conservador, reaccionario, oportunista y con algunos rasgos de la manera de ser que define un fascismo ordinario. Constituye un socio ideal para cumplir su papel en el vasto teatro del mercado nacional, y luego mundial. Este es el sujeto cuyos méritos, valores y talento se alaban actualmente. (Michel Onfray)


viernes, 25 de enero de 2019

EN LOS SUEÑOS (2019)





EN LOS SUEÑOS

Los seres queridos te acompañan siempre. No los adviertes, pero están ahí, en alguna zona intransitada de tu mente.  Y a veces vuelven.

Si marcharon hace poco, quizá los veas con claridad en un instante concreto de su vida. Resurge su mirada, algún gesto característico… puede que incluso oigas en su voz ciertas palabras.

Más adelante, con el tiempo, su imagen se inmoviliza, pierde brillo, se vuelve plana, empalidece, se difumina… y acaba desapareciendo en la blancura del olvido, en el abismo del silencio.

Entonces, sólo en los sueños vivirán de nuevo.

En uno, cuando vuelves a casa, a tu antigua casa, tu perra te recibirá impaciente y hablará y te dirá lo que entonces, para su desesperación, no podía explicarte, que sois hermanos, que siempre estará a tu lado, fiel y cariñosa.

En otro, tu amigo de juventud te sorprenderá con su presencia al abrir la puerta y te explicará que no hubo accidente, que todo fue un consecuencia de una confusión, de un malentendido, que ha vuelto de su viaje, de un largo viaje inexplicable, para siempre.

E incluso en otro, al girar una esquina te encontrarás cara a cara con aquella amiga que entretejía piedras y paños con hilos de colores. Sin palabras, con una sonrisa amplia, extenderá hacia ti una mano de la que al abrirse surgirá un enjambre de pequeños pájaros rojos…

Sí, viven en los sueños, solo en nuestros sueños, hasta que seamos nosotros los muertos.