El capitalismo ha formulado su tipo ideal con la figura del hombre unidimensional. Conocemos su retrato: iletrado, inculto, codicioso, limitado, sometido a lo que manda la tribu, arrogante, seguro de sí mismo, dócil. Débil con los fuertes, fuerte con los débiles, simple, previsible, fanático de los deportes y los estadios, devoto del dinero y partidario de lo irracional, profeta especializado en banalidades, en ideas pequeñas, tonto, necio, narcisista, egocéntrico, gregario, consumista, consumidor de las mitologías del momento, amoral, sin memoria, racista, cínico, sexista, misógino, conservador, reaccionario, oportunista y con algunos rasgos de la manera de ser que define un fascismo ordinario. Constituye un socio ideal para cumplir su papel en el vasto teatro del mercado nacional, y luego mundial. Este es el sujeto cuyos méritos, valores y talento se alaban actualmente. (Michel Onfray)


sábado, 15 de diciembre de 2012

NO-NO-RES (2004)




Jo sóc l'extraesfera que envolta l'univers. Norere de mi només enosteix el no-res. Tot el que es troba en la intraesfera es reflecteix en mi.

Sóc la imatge del que és i sóc reflex del no-no-res. Sóc la magnitud immesurable, omnipotent, tot ho sé i tot ho sento. Em redueixo en esferes concèntriques des del macrocosmos, m'agenollo davant la constel·lació més insignificant i guaito en una estrella qualsevol.

Ja et trobo, sí, aquí, en una partícula ínfima de matèria. Enretiro les ortigues i et contemplo sobre l'humus. Dorms, pateixes, et regires despentinat, suat i tremolant. Has esquinçat el llençol i les teves mans busquen refugi entre les entranyes de la terra. Dorms, somies, et creus un déu que tot ho pot, que tot ho sap i tot ho sent. Sí. I només ets un reflex en un somni. Agonitzes.


Quan despertis, ja no existeixo. Quan desperti, ja no existeixes.

jueves, 13 de diciembre de 2012

THE LANGUAGE OF THE LORD [Castellano] (2007)




...al cabo de un tiempo, aconteció que Caín presentó al Señor en ofrenda los más hermosos frutos de su cosecha; asimismo le ofreció Abel los más robustos recentales de su rebaño.

Y el Señor miró con agrado a Abel y a su ofrenda, pero de Caín y de su ofrenda no hizo caso, por lo que Caín se sintió deprimido sobremanera.

Y, con el semblante abatido, le preguntó al Señor:

—¿Acaso mi maldad es tan grande que no merezco tu mirada?

Y le respondió el Señor con toda su cólera:

—Once again! What are you saying? I don’t understand you! Why haven’t you learnt the Language? Look, I can understand this other servant. If you can’t speak like him, shut up when I’m present, because till then you’ll be a despicable animal, a beast without reason.[*]

Y, después de estas palabras, el Señor lo echó de su dominio. Y colocó ante la puerta un guardián armado con una espada de fuego para impedir que volviera ante su presencia.

Y Caín, confuso, marchándose de allí, vagó errante sobre la tierra hasta que, al cabo de no mucho tiempo, desesperado, se arrebató la vida.

Ese hecho acaeció en un paraje que, desde entonces, es llamado Death Beast’s Country y en el que, aún hoy, habitan sus descendientes.





[*] —¡Otra vez! ¿Qué dices? ¡No te entiendo! ¿Cómo es que no has aprendido a hablar la Lengua? Mira, a ese otro siervo sí que se le entiende. Si no hablas como él, cállate en mi presencia, pues hasta entonces para mí serás como un animal despreciable, una bestia carente de razón.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

THE LANGUAGE OF THE LORD [Català] (2007)




...al cap d'un temps, va esdevenir que Caïm va presentar al Senyor en ofrena els més bells fruits de la seva collita; així mateix li va oferir Abel els més robustos recentals del seu ramat.

I el Senyor es va mirar amb grat Abel i la seva ofrena, però de Caïm i de la seva ofrena no en va fer cas, i Caïm es va sentir entristit en gran manera.

I, amb el rostre abatut, va preguntar al Senyor:

—És que potser la meva maldat és tan gran que no mereixo la teva mirada?

—Once again! What are you saying? I don’t understand you! Why haven’t you learnt the Language? Look, I can understand this other servant. If you can’t speak like him, shut up when I’m present, because till then you’ll be a despicable animal, a beast without reason.

I, després d'aquestes paraules, el Senyor el va fer fora del seu reialme. I va col·locar davant la porta un guardià armat amb una espasa de foc per impedir que tornés davant la seva presència.

I Caïm, confús, marxant d'allà, va vagar errant sobre la terra fins que, al cap de no gaire temps, desesperat, es va llevar la vida.


Aquest fet es va esdevenir en un paratge que, des de llavors, és anomenat Death Beast's Country i en el qual, encara avui, habiten els seus descendents.

viernes, 30 de noviembre de 2012

¿ANTISEMITISMO? (2012)



Viñeta de Latuff


No hace muchos días leí en internet un artículo cuyo autor, en medio de una larga y no muy bien redactada explicación sobre las razones del fracaso de España como estado —y justo después de afirmar salvadorsostreando que una de sus grandes aportaciones a la cultura universal es el robo—, soltaba que «España sigue siendo uno de los países más vergonzosamente antisemitas del mundo, en dura pugna con Venezuela e Irán».

Siempre que leo afirmaciones como esta, me pregunto de dónde deben salir los datos que las sostienen y me contesto enseguida que seguramente la Jewish Agency for Israel, de la Global Jewish Advocacy o de alguna agencia de desinformación o de algún grupo de presión similares.

Realmente cuesta creer que Cataluña —todavía incluida dentro de España, desde un punto de vista jurídico-institucional— sea antisemita. Cualquier observador atento puede darse cuenta de que el sionismo goza de muchas simpatías entre la derecha catalanista, posiblemente porque Jordi Pujol siempre ha tomado como modelo esa ideología nacionalista judía, ya desde los tiempos más remotos de su proyecto mesiánico personal, pero también sin duda porque el sionismo mueve bastante dinero y tiene mucho poder político.

En el ámbito de la derecha catalanista hay destacados publicistas de la causa sionista, algunos dotados de un aura de intelectualidad como Joan B. Culla, y otros más bien burdos como Pilar Rahola, pero también hay bastante simpatizantes a la sombra como, por ejemplo, Alfons López Tena, que nos descubrió hace pocos días su simpatía por esa ideología: «Yo soy proisraelí y prosionista. Al menos la mitad de los miembros de mi partido son de la Asociación Catalana de Amigos de Israel ».

No tengo nada que objetar a sus declaraciones, cada uno es libre de sentir simpatía por un bando o por el otro en este conflicto, pero no dejo de encontrar sorprendente que quien cree que hay que liberar al pueblo catalán de la opresión destructora del Estado Español sienta tanta simpatía por el Estado de Israel en su lucha por aniquilar al pueblo palestino.

Dejando al margen, pues, el caso particular de Cataluña, contra la afirmación de que España es uno de los tres países más antisemitas del mundo, sólo me cabe argumentar que no creo que un estado que cambia sus leyes para proteger a criminales de guerra israelíes pueda ser tachado con ese calificativo tan desagradable. Eso fue lo que sucedió el año 2009, cuando el gobierno español, con el apoyo de PSOE, PP, CiU y PNV, reformó la Ley Orgánica del Poder Judicial para impedir que se volvieran a repetir actuaciones como la de un miembro de la Audiencia Nacional que pretendía juzgar Ben-Eliezer, ministro de Defensa de Israel, por una masacre de 2002 en la que murieron once niños palestinos.

Si como parece las fuerzas políticas mayoritarias españolas y catalanas coinciden en su simpatía hacia el sionismo y en su defensa del Estado de Israel, hay que pensar que los sospechosos de antisemitismo debemos ser, pues, la gente de la calle con un mínimo sentimiento humanitario a los que nos gustaría el fin de un largo conflicto en el que consideramos que ambos bandos ejercen una violencia que afecta víctimas inocentes, pero que al mismo tiempo no podemos dejar de denunciar que en este enfrentamiento del Estado de Israel utiliza misiles de la última tecnología y bombas de racimo de fósforo blanco para apoyar su política de limpieza étnica, mientras los palestinos se limitan a defenderse con piedras y cohetes artesanales para no seguir siendo aniquilados de manera lenta, pero inexorable.




jueves, 29 de noviembre de 2012

ANTISEMITISME? (2012)





Fa poc dies vaig llegir a internet un article l’autor del qual, enmig d’una llarga i no gaire ben redactada explicació sobre les raons del fracàs d’Espanya com a estat —i just després d’afirmar salvadorsostrejant que una de les seves grans aportacions a la cultura universal és el robatori—, deixava anar que «España sigue siendo uno de los países más vergonzosamente antisemitas del mundo, en dura pugna con Venezuela e Irán».

Sempre que llegeixo afirmacions com aquesta em pregunto d’on deuen sortir les dades que les sostenen i em contesto de seguida que segurament de la Jewish Agency for Israel, de la Global Jewish Advocacy o d’alguna agència de desinformació o d’algun grup de pressió semblants.

 

Realment costa de creure que Catalunya —encara inclosa dins Espanya, des d'un punt sw vista jurídic-institucional— ho sigui, d’antisemita. Qualsevol observador atent es pot adonar que el sionisme gaudeix de moltes simpaties entre la dreta catalanista, possiblement perquè Jordi Pujol s’ha emmirallat sempre en aquesta ideologia nacionalista jueva, ja des dels temps més remots del seu projecte messiànic personal, però també sens dubte perquè el sionisme mou força calers i té molt poder polític.

 

A l’àmbit de la dreta catalanista hi ha destacats publicistes de la causa sionista, alguns dotats d’una aura d’intel·lectualitat com Joan B. Culla, i altres més aviat barroers com Pilar Rahola, però també hi ha força simpatitzants a l’ombra com, per exemple, Alfons López Tena, que va descobrir-nos fa pocs dies la seva simpatia per aquesta ideologia: «Jo sóc proisraelià i prosionista. Almenys la meitat dels membres del meu partit són de l'Associació Catalana d'Amics d'Israel».

 

No tinc res a dir respecte les seves declaracions, cadascú és lliure de sentir simpatia per un bàndol o per l’altre en aquest conflicte, però no deixo de trobar sorprenent que qui creu que cal alliberar el poble català de l’opressió destructora de l’Estat Espanyol senti tanta simpatia per l’Estat d’Israel en la seva lluita per anorrear el poble palestí.

 

Deixant de banda, doncs, el cas particular de Catalunya, contra l’afirmació que Espanya és un dels tres països més antisemites del món, només em cal argumentar que no crec que un estat que canvia les seves lleis per protegir criminals de guerra israelians pugui ser titllat amb aquest qualificatiu tan lleig. Això és el que va succeir l’any 2009, quan el govern espanyol, amb el suport de PSOE, PP, CiU i PNV, va reformar la Llei Orgànica del Poder Judicial per impedir que es tornessin a repetir actuacions com la d’un membre de l’Audiència Nacional que pretenia jutjar Ben-Eliezer, ministre de Defensa d’Israel, per una massacre de 2002 en la qual van morir onze nens palestins.

 

Si com sembla les forces polítiques majoritàries espanyoles i catalanes coincideixen en la seva simpatia cap al sionisme i en la seva defensa de l’Estat d'Israel, cal pensar que els sospitosos d'antisemitisme devem ser, doncs, la gent del carrer amb un mínim sentiment humanitari als quals ens agradaria la fi d’un llarg conflicte en què consideren que tots dos bàndols exerceixen una violència que afecta víctimes innocents, però que alhora no podem deixar de denunciar que en aquest enfrontament l’Estat d'Israel utilitza míssils de la darrera tecnologia i bombes de dispersió de fòsfor blanc per donar suport a la seva política de neteja ètnica, mentre els palestins es limiten a defensar-se amb pedres i coets artesanals per no seguir sent anihilats de manera lenta, però inexorable.


(Publicat a Diari de Terrassa, 7 de desembre de 2012.)




lunes, 26 de noviembre de 2012

ALGUNES EDICIONS DE LES QUE HE TINGUT CURA - 1 (1999-2012)



Agustí Bartra & Miquel Martí i Pol, 
Miquel Martí i Pol i Agustí Bartra. Diàleg epistolar
Ajuntament de Terrassa, Barcelona, 1999.





Anna Murià, Reflexions de la bellesa
Publicacions de l'Abadia de Montserrat, Barcelona, 2003.





Anna Murià, Crònica de la vida d'Agustí Bartra
Publicacions de l'Abadia de Montserrat, Barcelona, 2003.





Anna Murià, La peixera
Publicacions de l'Abadia de Montserrat, Barcelona, 2005.





Anna Murià, El llibre d'Eli
Publicacions de l'Abadia de Montserrat, Barcelona, 2006.





Diversos autors, Llengües ignorades
Emboscall, Vic, 2006.




Diversos autors, De l'estètica a la política
Grup d'Estètica i Política Segle XXI 
Amics de les Arts i Joventuts Musicals, 
Terrassa, 2010.






Anna Murià, L'obra de Bartra. Assaig d'aproximació
Publicacions de l'Abadia de Montserrat, Barcelona, 2012.

martes, 13 de noviembre de 2012

MEMORIA MARCHITA (2012)



Fotografia de Jordi Gual



No me da miedo la muerte,
ya no.

Sé que la vida no es gran cosa,
lo poco de ella que vale la pena
el tiempo lo disuelve y se desvanece…

No me da miedo la muerte,
ya no.

En cambio, temo una agonía lenta:
¡qué aburrida y qué molesta!

Uno ni vive ni se muere,
memoria marchita, se deshoja.


domingo, 11 de noviembre de 2012

LOS SENDEROS PÁLIDOS DE LA TARDE (2012)


Fotografia de Jordi Gual




Marcho bajo una lluvia tibia y serena
por los senderos pálidos de la tarde.

La luz radiante del mediodía ciega
y nos ilumina una penumbra suave.

viernes, 9 de noviembre de 2012

TODO EN NADA (2012)



Fotografía de Ralph Gibson



Un libro que llegó a mis manos, no sé si comprado en un local húmedo y tenebroso de Barcelona o si inmerso en un aluvión de papeles viejos regalados por algún amigo poco aficionado a la lectura, un libro que entonces no leí y que quizá abandoné en algún estante, tras una hilera de títulos de renombre. Un libro que no he vuelto a ver, que no he vuelto a encontrar...

Un frase quizá leída en un libro insípido o soporífero —una frase sugerente o iluminadora, sin embargo— que he buscado de manera reiterada y sin fortuna entre sus páginas, como si la vida que me arrastra la hubiera borrado cuando ha hecho pasar sobre mí sus días caducos y sus noches fugaces. Una vida que me derrota con sus noches y noches insuficientes para restaurar mis fuerzas en un tiempo que califican de líquido y es movedizo, inestable, sofocante. Una vida que me asfixia hasta conseguir que no recuerde exactamente que decía esa frase y hasta hacerme dudar de si fue en ese libro u en otro o en ninguno...

Una palabra recuperada en una lectura cansada, una palabra en desuso, una palabra que me trae recuerdos de otro mundo, de un mundo casi olvidado, de frío y horas de tristeza tras los cristales, mirando las sombras que transitaban por la calle obscura bajo la lluvia, y las piernas bajo las faldas de la mesa camilla, los pies sobre el brasero, la bombilla de 25 apagada para ahorrar, esperando que el reloj toque las diez para ir a dormir, una palabra que la noche me ha hecho volver a olvidar...

Una sensación, la intuición de una reminiscencia inminente, un estado ánimo, el recuerdo impreciso de un sentimiento de armonía que se desvanece tras la niebla, un sueño que se disipa sin dejar huella en esta vigilia cegadora, un bosque obscuro en el que me adentro para perderme, una grieta que me engulle, un río amniótico que surge de la tierra para hundirse en la tierra sin dejar rastro, el pozo negro profundo y terrible donde todo desaparece, perdidas para siempre la mirada maravillosa, la lucecita feliz que se encendía en mi mente, las fragancias y las músicas que se derramaban como magma gorgoteante en los entonces inmaculados archivos de mi conciencia, perdidas para siempre, sí: la confirmación de que la vida todo lo que toca lo convierte en nada.

domingo, 4 de noviembre de 2012

viernes, 2 de noviembre de 2012

HACIA LA MUERTE (2012)



Fotografía de Maciej Duczynski 



Existo: bordeo el abismo con euforia,
avanzo apasionado hacia la muerte,
no desfallezco, vivo intensamente
cada pequeño fracaso como una victoria.





martes, 30 de octubre de 2012

NACIONALISMO TRIVIAL (2012)





Como no somos viejos ermitaños viviendo aislados en la soledad del monte agreste, sabemos muy bien que la democracia ha muerto. Hasta hace poco, al día siguiente de ganar las elecciones, los hombres de Estado europeos se olvidaban de buena parte de las promesas hechas a los electores y comenzaban a aplicar su programa oculto. Ahora ni eso, desde el día después de ganar las elecciones hasta el día en que salen por la puerta trasera del escenario de la farsa, los pequeños grandes estadistas de papel actúan bajo las órdenes dictatoriales del poder supremo del Mercado que transmiten los burócratas del Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea.

Pobres, ya no les queda ni la libertad de tener algún gesto de benevolencia hacia sus rebaños para compensarnos un poco por la manipulación a la que nos han sometido y por el desdén con que nos tratan, el gobierno de burócratas que ningún pueblo europeo ha elegido en ninguna elección, que no representa la voluntad de ningún ciudadanía, ahora también los tiene subyugados a ellos bajo su talón de hierro.

En este contexto, ¿qué significa independencia? ¿Qué significa tener el derecho a decidir? Tiene que significar gozar de una liberación que vaya más allá de segregar las instituciones de gobierno catalanas de las del Estado Español; tiene que significar rescatar la democracia, o sea, rescatar la secuestrada soberanía del pueblo de las manos caciquiles de nuestra clase política tradicional, encabezada por las derechas nacionalistas, y de las de los burócratas del FMI, el BCE y la CE; tiene que significar independizarnos en política exterior de la dictadura de los Estados Unidos y en política económica de la devastadora doctrina de la secta neoliberal; tiene que significar buscar alternativas a la economía capitalista —al borde del colapso, por cierto— explorando formas de economía participativa, planificada y controlada por los colectivos de trabajadores, los consumidores y las pequeñas y medianas comunidades administrativas...

Así pues, si el gobierno de Artur Mas convoca un referéndum sobre la independencia de Cataluña —espero que no se atrevan a proclamar el Estado Catalán desde el Parlamento, despreciando la voluntad directa de las ciudadanas y los ciudadanos—, deberíamos exigir que, en nombre del respeto al derecho a decidir, también se nos consulte sobre nuestra voluntad de alcanzar un gobierno democrático de verdad y de desvincularnos del neoliberalismo que está destruyendo los servicios públicos esenciales, que no respeta el medio ambiente, que ataca la cultura enriquecedora para favorecer el enriquecimiento con la cultura, que humilla a los pueblos, que les hace enfrentarse entre ellos... Si se puede preguntar si Cataluña quiere desvincularse de España, también se puede preguntar si Catalunya quiere desvincularse de todas las instituciones supraestatales opresoras.

Y no deberíamos dejarnos engañar por los que querrán meternos el miedo en el cuerpo. Las derechas catalanas dirán: «Eso es imposible, es una quimera, dejaos de ideología...». ¿No es lo mismo que dicen las derechas españolas en otro contexto?

Si sois de los que pensáis que hay que luchar y sufrir si se quiere vencer, si sois de los que pensáis que no hay que tener miedo a romper con el pasado si se lleva un mundo nuevo en el corazón, si queréis independencia, no os podéis conformar con un sucedáneo, hay que ir por todas, sin encogerse.

Se debe poder ejercer el derecho a decidir si queremos una democracia verdadera en la que la soberanía sea popular, las personas sean más respetadas que el Mercado y la sociedad tenga más poder que el Estado. Según mi criterio, esto es independentismo y cualquier otro «independentismo» será simplemente una manifestación de nacionalismo trivial, unas veces afable, otras arrogante, pero siempre ineficaz.


(Versión en castellano del texto «Nacionalisme trivial», publicado en Diari de Terrassa, 26 de setembre de 2012.)




lunes, 29 de octubre de 2012

VIVIENDA: ¿DERECHO SOCIAL O MERCANCÍA? (2012)





El derecho a la vivienda es un derecho social incluido en numerosos tratados internacionales y en las legislaciones de los estados europeos, pero de hecho estas evitan hacer referencias concretas al compromiso adquirido y ni especifican si una persona puede invocar su derecho a una vivienda en caso de no poder obtener una con sus propios medios ni, mucho menos, explican cómo podrían hacerlo.

En nuestro rudimentario y menguante Estado del Bienestar, la administración no ha considerado nunca el derecho a disfrutar de una vivienda digna desde el punto de vista de los derechos sociales, sino que siempre ha creído más importante el mercado inmobiliario que la ciudadanía.

En los últimos años, el problema del acceso a la vivienda ha empeorado debido al protagonismo de la construcción en el desarrollo económico del Estado. La política de vivienda se basó en buena parte en la concesión de ayudas a promotores y compradores, algo muy conveniente para los promotores que hicieron buenos negocios al abrigo del dinero público, pero que no fue de ayuda precisamente para los compradores. Una consecuencia de ello fue que se favoreciera con dinero público la construcción de viviendas para la venta en detrimento de la de viviendas de alquiler. Además, en 1985 la dificultad de alcanzar una vivienda se agravaba con un decreto promulgado por el ministro socialista Boyer que eliminaba la protección a los inquilinos.

Veinte años después, el gobierno de Zapatero proclamó unos cambios que hacían concebir esperanzas: la creación de un Ministerio de la Vivienda y el anuncio de la voluntad de fomentar el alquiler. Estos buenos deseos no acabaron dando ningún fruto apreciable y la crisis económica ha obstaculizado aún más que antes la posibilidad de alcanzar una vivienda digna.

Los problemas derivados de una falta de programación o de una planificación errática en la tarea de hacer efectivo el derecho a una vivienda digna tienen a buena parte de la población entre la espada y la pared. Quizá el tanto por ciento de personas sin techo —que viven en la calle— o sin hogar —que viven en albergues— no es todavía muy significativo, pero cada vez hay más que sufren inseguridad en su lugar de alojamiento —por la amenaza de desahucio, porque viven en viviendas saturadas o sin condiciones de habitabilidad— o que —entre nuestra juventud— no pueden independizarse por la conjunción de salarios miserables y precios de venta o alquiler inasequibles.

¿Qué políticas de vivienda podrían ayudar a escapar de este callejón sin salida? Evidentemente, un amplio abanico de medidas que contemplara las necesidades de los diferentes tipos de afectados: creación de pisos tutelados para personas sin techo y de ayudas públicas para personas que no puedan afrontar los gastos iniciales de un alquiler; intervención de la administración pública para evitar los desahucios mediante asesoramiento jurídico y gestiones de conciliación, y disposición de viviendas públicas para cederlas en casos de emergencia; proposición de incentivos a los propietarios de viviendas vacías para que los alquilen y creación de viviendas sociales en régimen de cesión de uso de la administración pública a los residentes y, por último, aplicación estricta del reconocimiento del derecho a la vivienda mediante la creación de estructuras administrativas con competencias específicas y protocolos ágiles y concretos que permitan exigir su aplicación por vía judicial.


(Versión en castellano del texto «Habitatge: dret social o mercaderia?», publicado en Diari de Terrassa, 26 d'octubre de 2012.)


lunes, 22 de octubre de 2012

HABITATGE: DRET SOCIAL O MERCADERIA? (2012)






El dret a l'habitatge és un dret social inclòs en nombrosos tractats internacionals i en les legislacions dels estats europeus, però de fet aquestes eviten fer referències concretes a aquest compromís adquirit i ni especifiquen si una persona pot invocar el seu dret a un habitatge en cas de no poder obtenir-ne un amb els seus propis mitjans ni, encara menys, expliquen com podrien fer-ho.


En el nostre rudimentari i minvant Estat del Benestar, l’administració no ha considerat mai el dret a gaudir d’un habitatge digne des del punt de vista dels drets socials, sinó que sempre ha considerat més important el mercat immobiliari que la ciutadania.


Els darrers anys, el problema de l’accés a l’habitatge va empitjorar a causa del protagonisme de la construcció en el desenvolupament econòmic de l’Estat. La política d’habitatge es va basar en bona part en la concessió d’ajuts a promotors i compradors, cosa molt convenient per als promotors que van fer bons negocis a redós dels diners públics, però que no va ajudar precisament els compradors. Una conseqüència n’és que es va afavorir amb diners públics la construcció d’habitatges per a la venda en detriment de la d’habitatges de lloguer. A més, l’any 1985 la dificultat d’assolir un habitatge s’agreujava amb un decret promulgat pel ministre socialista Boyer que eliminava la protecció als llogaters.


Vint anys després, el govern de Zapatero va proclamar uns canvis que feien concebre esperances: la creació d’un Ministeri de l’Habitatge i l’anunci de la voluntat de fomentar el lloguer. Aquests bons desitjos no van acabar donant cap fruit apreciable i la crisi econòmica ha obstaculitzat encara més que abans la possibilitat d’assolir un habitatge digne.


Els problemes derivats d’una manca de programació o d’una planificació erràtica en la tasca de fer efectiu el dret a un habitatge digne tenen bona part de la població entre l’espasa i la paret. Potser el tant per cent de persones sense sostre —que viuen al carrer— o sense llar —que viuen en albergs— no és encara gaire significatiu, però cada vegada n’hi ha més que pateixen inseguretat en el seu lloc d’allotjament —per l’amenaça de desnonament, perquè viuen en habitatges saturats o sense condicions d’habitabilitat— o que —entre la nostra joventut— no poden independitzar-se per la conjunció de salaris miserables i preus de venda o lloguer inassequibles.


¿Quines polítiques d’habitatge ens podrien ajudar a sortir d’aquest cul-de-sac? Evidentment, un ventall ampli de mesures que contemplés les necessitats dels diferents tipus d’afectats: creació de pisos tutelats per a persones sense sostre i d’ajuts públics per a persones que no puguin afrontar les despeses inicials d’un lloguer; intervenció de l’administració pública per evitar els desnonaments mitjançant assessorament jurídic i gestions de conciliació, i disposició d'habitatges públics per cedir-los en casos d'emergència; proposició d’incentius als propietaris d’habitatges buits per a què els lloguin i creació d’habitatges socials en règim de cessió d'ús de l’administració pública als residents; i, per acabar, aplicació estricta del reconeixement del dret a l’habitatge mitjançant la creació d’estructures administratives amb competències específiques i protocols àgils i concrets que permetin exigir la seva aplicació per via judicial.


(Publicat a Diari de Terrassa, 26 d'octubre de 2012. Versió reduïda del text «Habitatge: dret social o producte mercantil?
»)

martes, 16 de octubre de 2012

HABITATGE: DRET SOCIAL O PRODUCTE MERCANTIL? (2012)







El dret a l'habitatge és un dret social àmpliament reconegut. Està inclòs en tractats internacionals com ara la Declaració Universal dels Drets Humans, el Pacte Internacional de Drets Econòmics, Socials i Culturals i la Carta Social Europea. També està reflectit a les legislacions dels països europeus, la majoria dels quals inclou el dret a l'habitatge en les seves constitucions —a l'article 47 de la Constitució espanyola, per exemple—, però la realitat és que els diferents estats eviten fer referències concretes sobre aquest compromís adquirit i ni especifiquen si una persona pot invocar el seu dret a un habitatge en cas de no poder obtenir-ne un amb els seus propis mitjans ni, encara menys, expliquen com podrien fer-ho.

En el cas concret del rudimentari i minvant Estat del Benestar assolit a Espanya, l’administració no ha considerat mai el dret a gaudir d’un habitatge digne des del punt de vista dels drets socials, sinó des d’un punt de vista economicista segons el qual pesava més el cantó de la balança corresponent al mercat immobiliari que el cantó que corresponia a la ciutadania.

Durant els darrers anys, aquest problema de l'accés a l'habitatge va empitjorar a causa del protagonisme del sector de la construcció en el desenvolupament econòmic a l’Estat. Possiblement per aquest motiu la política d’habitatge es va basar en bona part en la concessió de crèdits i subvencions a promotors i compradors, cosa molt convenient per als promotors que van fer uns bons negocis a redós dels diners públics, però que no va ajudar precisament les persones amb pocs recursos econòmics.

Una conseqüència d’aquesta situació n'és que es va afavorir la construcció d’habitatges per a la venda amb diners públics en detriment de la d’habitatges de lloguer. A més, l’any 1985 la ciutadania va veure com la dificultat d’assolir un habitatge s'agreujava encara més a causa d'un decret promulgat pel ministre socialista Miguel Boyer que eliminava la protecció als llogaters contemplada a la legislació franquista.

Vint anys després, el govern de Rodríguez Zapatero va proclamar uns canvis que feien concebre esperances en una nova d’orientació administrativa que afavorís una política social d’habitatge: la creació d’un Ministeri de l’Habitatge, segregant del Ministeri de Foment les funcions corresponents, i l’anunci de la voluntat de tornar a fomentar el lloguer d’habitatge. Com ja sabem, tots aquests bons desitjos no van acabar donant cap fruit apreciable i la crisi econòmica ha obstaculitzat encara més que abans la possibilitat d’assolir un habitatge digne.

En aquest moment, els problemes derivats d’una manca de programació o d’una planificació erràtica en la tasca de fer efectiu el dret a un habitatge digne tenen col·locada bona part de la població entre l’espasa i la paret. Potser el tant per cent de persones sense sostre —que viuen al carrer— o sense llar —que viuen en albergs— no és encara gaire significatiu, però cada vegada n’hi ha més que pateixen inseguretat en el seu lloc d’allotjament —per l’amenaça de desnonament, per haver de viure de forma inadequada en habitatges saturats de residents o sense condicions d’habitabilitat— o que —entre la nostra joventut— no poden independitzar-se per la conjunció de salaris miserables i preus de venda o lloguer inassequibles.

¿Quines polítiques d’habitatge ens podrien ajudar a sortir d’aquest cul-de-sac? Evidentment, un ventall ampli de mesures que contemplés el context i les necessitats dels diferents tipus de persones afectades: la creació de pisos tutelats per a persones sense sostre i d’ajuts públics per a persones que no puguin afrontar les despeses inicials d’un lloguer; la intervenció de l’administració pública per evitar els desnonaments mitjançant l’assessorament jurídic i les gestions de conciliació, així com la disposició d'habitatges de propietat pública per cedir-los en casos d'emergència; la proposició d’incentius als propietaris d’habitatges buits per a què els ofereixin en lloguer i la creació d’habitatges socials en règim de cessió d'ús de l’administració pública als residents; i, per acabar, l’aplicació estricta del reconeixement del dret a l’habitatge mitjançant la creació d’estructures administratives amb competències específiques i protocols àgils i concrets que permetin exigir la seva aplicació per via judicial.